Hace poco, Cusco fue sede de la IV Cumbre de la Descentralización donde participaron Gobernadores Regionales y expositores invitados, nacionales y extranjeros. No participaron Alcaldes Provinciales ni Distritales, ni ninguna otra autoridad de otros organismos estatales descentralizados. En buena cuenta, fue una cumbre de Gobernadores Regionales.
¿Cuál fue el tema central del foro? Pues el de siempre – ¡cuándo no! – la descentralización del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF). O lo que es lo mismo: más presupuesto para las regiones y más autonomía para los Gobernadores Regionales. Incluso Castillo repitió la trillada imagen de las autoridades regionales – Gobernadores y Alcaldes – yendo personalmente al MEF en Lima para mendigar dinero para sus jurisdicciones… incluida la coima de 10% del presupuesto concedido.
A ese respecto, yo tengo algo que decir. En mi condición de Gobernador Regional de Ica entre los años 2015 y 2018 – efectivamente – fui muchas veces al MEF para realizar gestiones propias de mi función pública. Aparte de dar cuenta del manejo de las cuentas del Gobierno Regional, coordinábamos el financiamiento de varios proyectos y programas para Ica. Y – en honor a la verdad – nunca me pidieron nada indebido, y menos un porcentaje de los presupuestos conseguidos. Cero.
En ese sentido, me parece muy mal – incluso una cobardía – señalar al MEF como un antro de corrupción, sin mencionar con precisión a los funcionarios – supuestamente – corruptos. ¿Por qué son así la gran mayoría de nuestros políticos? ¿Por qué no dan los nombres y apellidos de los funcionarios coimeros? ¿Por qué las vagas generalizaciones que ensucian por igual a corruptos y honorables?
Seamos sinceros. Hay mucho cinismo – y oscurantismo – detrás de la mayoría de Gobernadores Regionales. Tanto que durante la cumbre en cuestión – que duró dos largos días – no se tocó para nada el tema de la corrupción. Sin embargo, el registro de las Fiscalías Especializadas en Delitos de Corrupción de Funcionarios (FECOF) indica que 19 de los 25 Gobernadores Regionales vienen siendo investigados por corrupción. Para mayor información Googleen “Gobernadores Regionales Corruptos” y conocerán los nombres de todos ellos… con Vladimir Cerrón a la cabeza.
No nos vengan con cuentos. Lo que quieren los Gobernadores Regionales – salvo honrosas y escasas excepciones – es más plata para robar, y más libertad para coimear. ¡La regionalización – o descentralización – de nuestro país fracasó! Y fracasó por lo moral. Mejor dicho, fracasó por la corrupción de la mayoría de Gobernadores Regionales.
El problema es que muy pocos proponen una solución al respecto. Muchos no quieren tocar el tema – ni siquiera quieren hablar – del fracaso de la regionalización en nuestro país. Otro – pocos – reconocen el fracaso, pero no proponen ninguna solución al respecto. Se quedan en el diagnóstico. Sin embargo, José Mujica – un lector de Lampadia – publicó hace poco un comentario muy aleccionador a raíz del excelente artículo que escribió Fausto Salinas del Cusco titulado “La dinámica de las regiones… un fracaso que debemos corregir”; precisamente a raíz de la reciente Cumbre de la Descentralización.
En síntesis, lo que dice José Mujica es: “… Ningún movimiento político y ningún político en particular trabaja para construir consensos ciudadanos. Eso demuestra que no son democráticos. – Y agrega. – Alcanzar la verdadera democracia no depende de los políticos, sino de los ciudadanos. Y en el contexto actual los políticos son un obstáculo para alcanzarla.”
Construir consensos ciudadanos, exigirle al Estado el cumplimiento de dichos consensos, fiscalizar y denunciar a los corruptos… lo que José Mujica nos está diciendo es que tenemos que ser mucho más activos. Se refiero a nosotros, los ciudadanos.
A lo cual yo agregaría. Quitarle a los Gobiernos Regionales las competencias de salud, educación, e infraestructura. Y quitarle a los Gobiernos Municipales, las competencias de agua y saneamiento, vivienda, y limpieza pública. Sencillamente, porque han fracasado. Y – en su reemplazo – crear instituciones autónomas especializadas, blindadas de los políticos, que implementen los consensos ciudadanos que propone Mujica.
Al pan, pan; y al vino, vino. La Regionalización fracasó por culpa de los Gobernadores Regionales. ¡Ahí está la explicación… ellos son la corrupción!