La pregunta es porqué – teniendo tan buena información, y sobre todo tan actualizada – el Estado no haga buen uso de ella. ¿Acaso alguien está controlando el crecimiento desbocado de la burocracia improductiva en el Estado? Nada que ver.
Ojo. No me refiero a maestros, médicos, policías, y jueces. Tampoco me refiero a ingenieros y técnicos que construyen obras de infraestructura. Al contrario. Bueno fuera que crezcan más los presupuestos públicos para dichos servicios. Claro que queremos más – y mejor – educación, salud, seguridad, y justicia. Claro que queremos más – y mejores – redes de agua, carreteras, puertos, escuelas, hospitales… Pero no. No me refiero a estos profesionales del sector público.
Me refiero a la burocracia que no enseña, no cura, no protege, y no juzga. Me refiero – también – a la burocracia que no construye nada. Me refiero a la burocracia chupa tinta. A los que nos hacen perder tiempo injustificadamente. A los que nos piden requisitos absurdos para atender nuestros derechos. A los que nos maltratan cruelmente. En buena cuenta, me refiero a los burócratas que no nos brindan ningún servicio.
Ahora bien. ¿Qué dicen las estadísticas del MEF y BCR, respecto al 2019? Pues que la economía creció 2.3%. Y que la recaudación tributaria creció 4.9%.
Ahí nomás tenemos 2 récords. Uno. ¡Nunca – antes – habíamos producido tantos bienes y servicios como en el 2019! Y dos. ¡Nunca la SUNAT había recaudado tantos tributos como el año pasado! Sí pues. A pesar de la crisis política. A pesar del cierre del Congreso. A pesar de los escándalos de corrupción… léanse Lava Jato, Cuellos Blancos, y varios etcéteras más. A pesar de todo ello, en el 2019 las empresas y ciudadanos peruanos pagamos más Impuesto a la Renta (IR) y más Impuesto General a las Ventas (IGV) que nunca antes en el pasado.
CONCLUSIÓN: El problema no está por el lado de la economía. Aunque – ciertamente – debería crecer mucho más. El problema está por el lado del excesivo y creciente gasto en burocracia improductiva, la cual creció ¡6.7%! en el 2019. O sea, más que la recaudación tributaria.
La burocracia improductiva del Estado se ha convertido en una enorme carga para todos los peruanos. La economía crece y la recaudación también. Pero los servicios de educación, salud, seguridad y justicia no mejoran. ¿Porqué? Pues ya sabemos. La burocracia improductiva se chupa todo el crecimiento de la recaudación tributaria… y más.
¡Ahí están los grandes aguafiestas!